bonviveur.es
También llamados huevos nevados. Es un postre casero de origen inglés, muy apreciado por los franceses, que lo llaman "oeufs à la neige". En ellos domina el merengue, una golosina que se popularizó en el siglo XVIII, un dulce de forma generalmente aovada, hecho con clara de huevo y azúcar y cocido al horno. Su nombre viene del francés "meringue".
Parece que las islas flotantes fueron ideadas en Francia en 1720 por el pastelero suizo Gasparini, que ejercía en Mehringer (cantón de Berna), de donde tomó el nombre. Sin embargo, el merengue ya se menciona en 1691, en el libro de François Massialot "Le cuisinier roïal et bourgeois".
También se dice que los primeros merengues fueron servidos en 1730 en Francia al rey de Polonia Stanislas, suegro de Luis XV.
Estas deliciosas islas flotantes se hacen con relativa facilidad. Con un litro de leche, una vaina de vainilla abierta a lo largo, ocho claras de huevo batidas a punto de merengue con pizca de sal y 100 gramos de azúcar.
Las yemas se ponen con un poco de leche avainillada, vigilando que no cuajen. Se remueven 3 minutos sin dejar hervir. Se añade el resto de leche. Cuando espesa, se coloca en una fuente honda. En una cacerola con agua azucarada hirviendo, se cuajan las islas de una en una y se van poniendo sobre la crema de la fuente. Deben ir a la nevera antes de ser comidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.